Santino Iosipescu, 2024.

Realidades que rompen ojos

‘’Realidades que rompen ojos’’ es una manera de expresar la idea de que, cómo nuestra percepción es tan susceptible al entorno del que formamos parte, si este sufre alguna disrupción que altere su conducta, se nos pueden llegar a salir los ojos de lugar.
Al criarnos y desenvolvernos en ámbitos que se nos son impuestos (aparentemente) como normales, nuestra mirada del mundo se va amoldando a un sistema de normas morales y ordinarias, que acaba determinando nuestro comportamiento. Este proceso del cual no solemos ser conscientes, o no queremos serlo, implica la omisión de un montón de aspectos que no dejan de formar parte de nuestra realidad.
Basta prestar la suficiente atención, o simplemente ser inoportuno, para entrar en razón y notar los quiebres que contiene nuestro entorno; aparentemente rellenados con ilusiones, aprobadas por la política de turno, para así olvidarnos de la verdadera forma de nuestra realidad.
Estas roturas, a su vez, explican por qué muchas veces nos sentimos incómodos con lo cotidiano; hacen entrever las cosas que quedan por fuera de nuestro órden de vida y, por consiguiente, cuestionarnos a nosotros mismos y a nuestro entorno; entrando así en un estado liminal.

Desarrollo técnico, estético y conceptual

Está práctica artística busca explorar los efectos de la ‘’liminalidad’’, como se menciona en la introducción.

Vamos a entender lo liminal como algo que está entre dos estados: una sustancia que se está emancipando de un cuerpo regido por un órden determinado, pero que a su vez, está en un proceso de formación a uno nuevo. Podríamos hasta relacionarlo con el estado del sueño que plantea Brea1. “Uno que media con lo ordinario, traduciendo un estado descompensado de energías, dentro del campo regular de intensidades de un sistema dado; desestabilizando la ecuación de equilibrio que lo gobierna.”

Es así como, desde lo visual, esta producción de “new media art2 proyecta figuras que pueden considerarse en un lugar, como en otro, dependiendo del espectador.
Por eso, en el canvas que muestra p5.js –biblioteca de JavaScript que permite la existencia de esta producción–, se estableció un fondo negro, con una capa de puntos por encima, que actua como un segundo fondo. Consideración pertinente para plasmar los dos órdenes sobre los que opera una liminalidad.

En éste caso, tenemos por un lado, el órden de fondo negro; evocando con este valor a la incertidumbre, por lo oscuro, su poca visibilización, cierta sensación de atemporalidad y drama. Es un estado al que se podría estar emancipando la figura de la mujer, si la consideramos como un ente. Mientras, que gran parte de ella, su cara, permanece todavía dentro de la capa de puntos, el sistema del cuál está saliendo. Éste, se caracteriza por ser una iteración que genera patrones de puntos con distintas tonalidades de gris, dando una impresión de viento, que mueve los otros elementos que contiene: los barriletes. Estos, al desplazarles el cursor por encima, pasarán a doblarse como si rotaran alrededor de su limen, sin permanecer en un lugar ni otro. Luego, sus elementos se reincorporan si el cursor sale del área de los barriletes. El objeto de este funcionamiento es mostrar un sistema que se altera, y que también descoloca la mirada de quienes forman parte de él.
De esta forma, la liminalidad se hace cada vez más presente. Primero, con la posición de la mujer, luego con la forma inestable de los barriletes y la dispersión de los ojos, y finalmente con una nueva formación de las figuras.

Esta producción, además, trabaja en base a la estética e ideología de las obras de Antonio Berni. Entre ellas, la versión de “Ramona montiel” , que expusó en la convención “Arte y Cibernética”, de 1969.
Así, entre todas las figuras presentes, que intentan dar una impresión de collage (técnica muy explotada por Berni), se reutiliza la de este personaje tan icónico: Ramona. Uno que nació a partir de la encarnación de una prostituta, sometida en una cruel Rosario de 1930. Ciudad que él describe, como una en que, tanto la mafia como la marginalidad, eran moneda corriente; “una realidad que rompía ojos”.

Bibliografía

BREA, José Luis. (2002). “Breve (y desordenado) antiglosario –o diccionario de tópicos- sobre el arte electrónico” en La era postmedia. Salamanca: CASA Editorial, pp. 4-8.

BREA, José Luis. (2008). “Redefinición de las prácticas artísticas (s. 21)” en El tercer umbral. Murcia: CENDEAC, pp. 106-113.

ASCHIERI, Patricia. Arte y Liminalidad. Explorar la performatividad del intervalo.

Wikipedia. Bíografía de Antonio Berni.