micaela avila, 2024.

acromatico

La producción se desarrolla en base a la obra de la artista Vera Molnar, tomando elementos característicos en cuanto a su estilo, concepto y técnica. Una pieza, que en este caso se desprende del mundo estático para adquirir dinamismo a tan solo un click.

Desarrollo técnico, estético y conceptual

Esta producción se desarrolla en base a la obra de la artista Vera Molnar, tomando elementos característicos en cuanto a su estilo. Es una producción abstracta, la cual plantea dos vistas iniciales: la primera si bien carece de movimiento real, genera una sensación de vibración y movimiento por la distribución de las figuras primitivas dentro de la composición, utilizando dos valores fundamentales, negro y blanco. En la obra se repite y juega con los espacios positivos Y negativos de las figuras, que sugieren perceptivamente un efecto de profundidad. Y a diferencia de la producción de nuestra artista referente, las figuras no son moduladas, más bien se mantienen homogéneas. En una segunda instancia, técnicamente hablando podremos encontrar por medio de los métodos de entrada, a tan solo un click, figuras que contienen movimiento, y será elección del espectador, cuando detenerlo o prologar este movimiento, capturando en cada interacción una nueva composición.

Hay dos obras de la artista Vera Molnar que fueron fundamentales para guiar el partido estético de esta producción: “Hypertransformation 19” y otra que es parte de la muestra “Hablarle al ojo”. En ambas se trabajan la repetición, la variación y la percepción de las figuras. Sin embargo, esta práctica artística se completa con la participación del espectador y la oportunidad de, quien produce, correrse del rol tradicional facilitando el espacio para que se produzca esta experiencia y participación del público, adquiriendo un nuevo significado.

Como se mencionó anteriormente, no hay una única versión, sino más bien dos vistas iniciales que varían con la interacción de quien opera. El tiempo en el que se desarrolla el relato multiplica las narrativas. José Luis Brea, en su texto “Redefinición de las prácticas artísticas”, hace referencia a la narración como una de las vías fundamentales para el desarrollo de las prácticas artísticas, junto con la generación de acontecimientos y la mediación. Estas vías destacan la importancia de que la obra no tiene un único relato, sino que este va cambiando según la interpretación de cada espectador. Además, habilita espacios y encuentros de socialización ante ese hecho artístico, junto con la participación de las redes o plataformas en línea, como un medio para conectar a las personas y fomentar el intercambio de ideas y conocimiento. Y esta socialización e intercambio da paso a lo que José Luis Brea llama en su libro “Breve (y desordenado) antiglosario –o diccionario de tópicos- sobre el arte electrónico”: la “critica inmanente”,el autor fundamenta que es una herramienta primordial con la que se ha producido todo lo que conocemos como arte y fundamenta que “Sólo aquellos lenguajes, o dominios de producción significante, en los que se procede a una exploración crítica de sus propios límites -contribuyen producciones que legítimamente debemos considerar “arte””. Este enfoque puede involucrar al espectador en la interpretación y evaluación de la obra. Y al hacerlo, se fomenta una reflexión profunda sobre los límites y posibilidades del arte, abriendo nuevas perspectivas y enriqueciendo la experiencia artística.

Bibliografía

BREA, José Luis. (2002). “Breve (y desordenado) antiglosario –o diccionario de tópicos- sobre el arte electrónico” en La era postmedia. Acción comunicativa, prácticas (post)artísticas y dispositivos neomediales. Salamanca: CASA Editorial, pp. 4-8..

BREA, José Luis. (2008). “Redefinición de las prácticas artísticas (s. 21)” en El tercer umbral. Estatuto de las prácticas artísticas en la era del capitalismo cultural. Murcia: CENDEAC, pp. 106-113.